TVE y los recortes

Dentro de un año la televisión que sintonizamos en estos momentos en las flamantes pantallas planas tendrá un panorama distinto al actual. No sólo por la acelerada integración de contenidos vía internet gracias a la popularización de monitores más avanzados, sino por la cancelación de canales en la TDT y una señal de TVE que está condenada a reducirse en la cantidad de cadenas y a verse mermada también en la calidad de sus contenidos. La 1, a la espera de un presidente que podría anunciarse pocos días después tras la Semana Santa, inicia un retroceso en los índices de audiencia que se prevé imparable aun con los (costosos) Juegos Olímpicos. A su vez las dos grandes cadenas privadas van a aumentar su oferta estelar de ficción y deporte con el ascenso de la facturación publicitaria, tras un primer trimestre realmente nefasto para el mercado mediático.

La 1 va a dejar en marzo de ser la cadena más vista en España, tras afianzar su posición en 2009 con la supresión de anuncios. La exigencia del Gobierno de un recorte de 204 millones de euros en su presupuesto anual ha llevado a la cadena pública a congelar su producción de series en prime time, a la espera de la decisión de un nuevo presidente de RTVE que llegará con la tijera en la mano, y a asumir la renuncia de la mayoría de los derechos deportivos. La final de Champions, que se desea entre Madrid y Barcelona, puede ser el apoteósico, y adelantado, fin de la competición de La 1, que también se despide este mayo de Canal Sur. Masters de tenis, la Liga ACB o el Tour serán algunos de los acontecimientos que están llamados a desaparecer de Teledeporte, cadena que a vez caería de la oferta junto a Clan.
El primer canal de TVE, además, se va a mínimos sin series. Actualmente su cuota nacional del mes es del 12,8%, exactamente la cantidad de público que seguía La 2 hace veinte años, cuando sólo había cuatro canales y medio a nivel nacional. Telecinco es líder a más de 1 punto y Antena 3 está a 6 décimas de la cadena pública. El conjunto de canales de RTVE en la TDT está por debajo ya del 20%. En Andalucía, para beneficio de Canal Sur, La 1 (10,8) está sólo 1 décima por encima de la cadena autonómica, llamada a relevarla como tercera opción. Entre los andaluces Telecinco ha aumentado casi 1 punto respecto a febrero, y mantiene su liderazgo desde hace un año, con un 14,6%. Con la Eurocopa y el Mundial de motociclismo a la principal cadena de Mediaset le aguarda un verano espléndido. Su conjunto de canales, con Cuatro en ascenso, sumaron en Andalucía más del 27%. Antena 3 es segunda con un 13,2% de share. Con La 1 fuera de juego, la privada del Grupo Planeta reserva una batería de ficciones propias y otros estrenos para disputarle la supremacía a Telecinco, con la Fórmula 1 como principal acontecimiento deportivo. Con una fusión autorizada con La Sexta los canales de Antena 3 se aproximarán al 25% tanto en Andalucía con en el conjunto de España. RTVE, por su parte, va a bajar del 20%, menos de los que hace diez años sumaba entre La 1 y La 2. Su media en 2011 fue del 22,3%, cifra que va a quedar lejos cuando acabe el año.

Unos meses venideros que van a estar marcados en lo audiovisual con el más que probable tijeretazo al propio espectro de la TDT. La liberación de la franja digital para internet móvil, lo que se ha llamado "dividendo digital" (la subasta del segmento entre 790 y 862 megahertzios), traerá 2.000 millones de euros de ingresos para el Estado. La ubicación de los múltiplex actuales que ocupan esa franja, y la resintonización, de aquí a 2014, iba a suponer 800 millones  de gastos. El Ministerio de Industria va a presentar a los operadores que no se compensar con más espacio para la TDT y, por tanto, el ahorro de gastos para todas las partes con la cancelación de la mitad de todos los múltiplex.  

La obligada reordenación física de la TDT invita así a la reordenación empresarial. Antena 3 y Telecinco, con sus respectivas adquisiciones de Prisa y La Sexta,  verían a la mitad su número de cadenas, tal como sucederá con RTVE,  y un múltiplex compartido para las licencias de Vocento y El Mundo que, de todas formas, están explotando terceros como son los casos de Disney, MTV, Discovery y, próximamente, Paramount. 
Menos canales, menos gastos generales y una tarta publicitaria que se podría explotar mejor, con una RTVE reconfigurada en su ajuste duro, al que también están llamadas todas las autonómicas.